Empezamos!
Poner a coger 9 laminas de pasta (para lasaña de tres pisos). Yo siempre pongo el paquete completo por sí se me pegan, si sobra se pueden utilizar para montar una lasaña pequeña de jamón de York y queso. Dejamos la pasta el tiempo que indique el fabricante, 7 minutos en mi caso. Retirar y dejar con agua fría hasta que las usemos.
Ponemos en una sartén con aceite tomate triturado de medio kilo y freímos hasta qué quede muy compacto. Añadimos azúcar y sal al gusto y aportamos. En mi caso he aprovechado la conserva de tomates de la huerta de mi padre de este verano, colando el líquido sobrante. Retiramos el tomate y ponemos aceite de nuevo en la sartén y pochamos una zanahoria en juliana, dos dientes de ajo, medio pimiento y 200 gr de champiñón laminado.
Cuando este dorado añadimos 400 gr de carne picada mixta (cerdo y ternera). Salamos todo. Una vez dorado todo, añadimos el tomate y dejamos a fuego lento unos 10 minutos.
Después preparamos la bechamel, ponemos una sartén con aceite (unos 70 gr) dos cucharadas grandes de harina y sal, tostamos la harina y añadimos leche poco a poco. Añadir pimienta al gusto. Y empezar a añadir leche (mejor sí está del tiempo, no fría). Remover hasta que quede una salsa ligera, no muy espesa.
Ya tenemos todo para montar la lasaña, y en una fuente de horno ponemos tres capas de lasaña (previamente escurridas) y añadimos carne y bechamel. Así hasta tres veces. Terminamos el montaje con queso rallado y ponemos 15 minutos en el horno previamente caliente a 250grados.
Y nada más! Lista para comer, estaba especialmente buena.
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